Fiel a mi costumbre intento pasarte de largo, Por temor a que mi piel recuerde que murió en tus brazos, La fe se me escapó contigo, Perdieron rumbo mis zapatos, Y a la deriva a veces lloro Imaginando todo lo que no pasamos.
Y ella lo sabe, Y no dice nada, Ella lo sabe, Que tras de tu recuerdo un día se me fugó el alma.
Ella no hiere como tú, No exige tiempo como tú, Llegó una noche y se quedó a esperar, el alba.
Ella no actúa como tú, No finge amor tal como tú, Me mira y sabe que tal vez, No habrá mañana, No habrá mañana.
Traté con más pena que gloria de olvidar tu espalda, Pero mi cuerpo en otros brazos Terminaba por, trazar tu mapa, Tu nombre me quebró el silencio, Y se escapó de madrugada, Cuando dormido y por error, Le supliqué a la noche que te regresará.
Y ella lo sabe, Y no dice nada, Ella lo sabe, Que tras de tu recuerdo un día se me fugo el alma.
Ella no hiere como tú, No exige tiempo como tú, Llegó una noche y se quedó a esperar el alba.
Ella no actúa como tú, No finge amor tal como tú, Me mira y sabe que tal vez, No habrá mañana.
Ella es tan diferente, Tan distante, tan callada, Ella no hiere como tú, No exige tiempo como tú, Llegó una noche y se quedó a esperar, el alba.
Ella no actúa como tú, No finge amor tal como tú, Me mira y sabe que tal vez, No habrá mañana, No habrá mañana.
Llueve en el silencio ausente de mis desengaños, Porque el olvido no me deja rescribir La historia fuera de tus brazos.
Y ella lo sabe, Y no dice nada, Ella lo sabe, Que tras de tu recuerdo un día, se me fugó, el alma.