Viejo barrio de mi ensueño, el de ranchitos iguales, como a vos los vendavales a mí me azotó el dolor. Hoy te encuentro envejecido pero siempre tan risueño, barrio lindo. .. Y yo qué soy... Treinta años y mirá, mirá que viejo estoy...
Mi barrio reo, mi viejo amor, oye el gorjeo, soy tu cantor. Escucha el ruego del ruiseñor que, hoy que está ciego, canta mejor. Busqué fortuna y hallé un crisol; plata de luna y oro de sol. Calor de nido vengo a buscar... Estoy rendido de tanto amar.
Barrio reo, campo abierto de mis primeras andanzas, en mi libro de esperanza sos la página mejor. Fuiste cuna y serás tumba de mis líricas tristezas... Vos le diste a tu cantor el alma de un zorzal que se murió de amor.