Yo no soy quien, para hablar mal de nadie. Pero Osvaldo, era un irrespetuoso, un tremendo hijo de puta, un ignorante, mentiroso, un avaro, mal criado, un jodido hinchapelotas, un estúpido, un tarado, un sorete mal cagado drogadicto y maricón.
Osvaldo era un inoportuno, tan feo como la mierda, medio gil, medio boludo, inconstante, insolente, un corrupto malicioso, una bosta indecente un creido fastidioso, un deficiente mental.
Osvaldo, era un vago perezoso un ingerto intolerable un abusador un flojo inperfecto en todos lados un ser tan desagradable, insoportable tacaño pasa a ser imperdonable altanero estafador.
Menos mal que no lo conocí agradezco nunca haberlo visto ni haberme cruzado con el ni haber oido hablar de el ni de su forma de ser
Yo sólo sé que Osvaldo era un arrogante sucio un inmoral incurable un incoroso indesiable para nada razonable un inexpresivo infame irresponsable indignante indisciplinado inepto indiscreto incumplidor
¿Y què pasa si somos así? y capaz que no nos damos cuenta no permitas que hable mal de mi aunque todos diferentes sean sangramos igual.