Por quererte mujer consentida, he perdido de mi alma la fe. He perdido esas joyas queridas Que me dieron el ser y la vida Y cuidaron en mi la niñez
Por tu amor he fingido esas leyes Que dio el pueblo y realista moses. Olvidado tan santos deberes Te adore como aquéllos infieles Por tu imagen a dios despreci.
El primer mandamiento nos dice, Ama a dios sobre todas las cosas Y este amor que tanto se me exigir, Te lo e dado y el piso lo existe Porque tu eres la de mi alma la diosa.
El segundo precepto creo que es, No jurar el nombre de dios en malo Y integrate jurado a la vez; En el cielo seguirte atraves, En la gloria hasta venir a tu lado
El tercero muy bien se contesta, En rendirle obediencia al creador; Santifica los dos dias de fiesta; Y yo rindo junto a tu belleza, Estacionado me solo en tu amor.
El cuarto mandamiento nos manda; Honraras a tus queridos padres; Y ingrate norquiadaz y parrandas: Por la calles reunions me falta De consagro en mis dulce cantares
En el quinto muy bien se refiere No matar nadie en la vida Pero si en brazos de otro de viere Esa lay saco suelto en pulpiere Conviertiendome en cruel homisida
En el sexto muy bien se prohibe No fornicar porque es un adultiero Y yo digo que esos imposible Porque al ver te con todo sublime De mi amor sera el unico anhelo
Notaras el septimo nos dice Esa ley que moses publico Pero yo si dios me permite Robare para hacernos felizes En el mundo mientras viva yo
El octavo es no levantaras A niguno falsos testimonies Se en reunions llego a difamar A mi prójimo sin vacilar Ese crimen me exige el demonio
El nove no codiciara En el mundo las cosas ajenas Pero haber tu seductora paz Si casada te veo soy capaz De adorarte aunque marido tengas
En el décimo en no desiaras La mujer que tenga su marido Y yo a las casadas quiero mas Porque en ellas puso satanas El amor mas dulce y actractivo
Para que los coros celiestales No reciben alla en la mansion Es preciso que ante los altares Un digno sacerdote juntare nuestras almas unidas las dos Me despido un raro contento Adios blanca azucena de amor Adios dueña de mi pensamiento De presente que estos mandamientos no consagra en tu nombre el autor