Tú, que te entregaste en cada paso de la vida, y que has devuelto por el mal una caricia, y siempre sufres por los que no tienen pan.
Tú, eres un hada que ha cobrado vida, que me enseñó a hablarle a Dios todos los días, y a darlo todo por amor a los demás.
Sé, tu evolución no pertenece a estos días, aún te recuerdo en tu amada guardería, sembrando en los niños la verdad.
Y hoy, que ya no tienes la fuerza de antes, y te han cansado los farsantes, yo quiero que sepas que al acostarme, te necesito como antes, y que me arropes, una vez más...
Y esto que escribo es para ti, que canto con la garganta hecha pedazos, cada vez que escucho de tus labios, que ya no sientes ganas de vivir. Y esto que escribo es para ti, con llanto me ha costado terminarlo, al ver que se me alejan tus brazos, y ya no puedo hacer nada por ti. Oh Memé... Siempre sabrás que te amaré...
Sabes, que aunque mis tiempos no me lo permitan, y las distancias se agranden cada día, en mi mente y en mi alma siempre estás.
Y, cuando llegue ese día que ansias, y disfrutes de tu paz tan merecida, donde vayas me protegerás.
Y hoy, que ya no tienes la fuerza de antes, y te han cansado los farsantes, yo quiero que sepas que al acostarme, te necesito como antes, y que me arropes, una vez más...