El eco de las plazas, repletas de homosapiens Que procuraron discos y casetes para el diario Salpican las canciones entre un montón de edades Y entonan las que pasan y no pasan por la radio. Mi cabeza llaman hueca porque tejí baladas Con la punta de los besos que dejaron los amantes Con adioses que repletan los andenes y aeropuertos Con la prisa que vuelve viajero terminable. Viajero terminable, viajero terminable.
Y donde me hice daño, quiero dejar señales Algo así como ¡Cuidado!: Camino traga tiempo Solo aprendí a crecer cuando el dolor fuera ya muy grande Y me lo dijo un sucio charco que reflejaba el cielo. Como las musas van siempre “libre de culpas” El tiempo es quien se bebe los empeños que le importan El éxito maldito cobra un precio muy violento Masoquismo a largo plazo y exigencia de luz corta Quien te dijo que no se despeinarme en armonías Y enquistarme en ultra versos, aunque nadie entienda nada Lo que pasa es que me aburro si no pago los impuestos Con que costeo el poco fuego y mucho humo de otras pajas.
Paradigmas son esos cantores más genuinos Que entre palos nos parieron, arte revolucionario Cantáronle a los pobres y a sus sueños más divinos Y los pobres, kilo a kilo, los volvieron millonarios. Y la pasión me arrastra a sumarme a los torrentes Donde mi trova ligera y algo abstemia no se traba. Mi compromiso empieza en las sonrisas de la gente Cuando ya sin ser ingenuos, la pasión no se le apaga.