Se llama Lola y tiene historia, aunque más que historia sea un poema. Su vida entera pasó buscando noches de gloria como alma en pena. Detrás de su manto de fría dama tenía escondidas tremendas armas, para las batallas del cara a cara que con ventaja muy bien libraba. Le fue muy mal de mano en mano, de boca en boca, de cama en cama, como una muñeca que se desgasta, se queda vieja y la pena arrastra.
CORO Oyeme mi Lola, mi tierna Lola, tu triste vida es tu triste historia. Pero que manera de caminar, mira que soberbia en su mirar. Oyeme mi Lola, mi tierna Lola, tu triste vida es tu triste historia. Pero que manera de caminar, mira que soberbia en su mirar. Oyeme mi Lola, mi tierna Lola, tu triste vida es tu triste historia.
Fue mujer serena hasta el instante de entregarse presta a sus amantes Es tiempo de llanto, es tiempo de duda, de nostalgia y de su locura. Tienes el consuelo de saberte llena de cariño limpio y amor sincero, por que nadie supo robar de tus besos eso que hoy te sobra y que nadie añora.
CORO
Es el tiempo de la arruga que no perdona, es el tiempo de la fruta y de la pintura.