Si quieres, te cuento los cuentos que tu me contabas.
Si quieres te escribo una lista con nombres y camas.
Si quieres me sigo creyendo que fuiste una santa. no tienes perdón.
Como tienes la poca vergüenza de entrar en mi casa. Como tienes valor de llamar por las noches a ver que me pasa. Como tienes la lengua tan larga y la risa tan falsa, no tienes corazón.
Y mírame a la cara atrévete a negarme que conoces tantas camas como historias que contarme.
Mejor no des detalles prefiero que te calles que me evites que te halague con piropos y verdades.
Tuviste muy poco respeto y poco cuidado. Hiciste que fuera el payaso en tu circo privado. Dejaste un imbécil muy grande en mi frente pintado No tienes perdón.
Ahora entiendo el afán por viajar con tu hermana a la Habana. O las cenas aquella con tus compañeras una vez por semana. Y los viejos amigos y algún que otro primo que ya peinan canas No tienes corazón.
Y mírame a la cara atrévete a negarme que conoces tantas camas como historias que contarme.
Mejor no des detalles prefiero que te calles que me evites que te halague con piropos y verdades.
Y Me debes año y medio mucha sangre tu me debes y tu culpa es mi remedio ¡Sean benditos tus deberes!
Y mírame a la cara atrévete a negarme que conoces tantas camas como historias que contarme.
Mejor no des detalles prefiero que te calles que me evites que te halague con piropos y verdades.
Compositor: Manuel Quijano Ahijado (Cafe Quijano) ECAD: Obra #14460396