Despierto cada día queriendo ser defensa, fiscal y juez; usted, yo y él. Quiero saber que hicieron, que harán y que no harían o ser el papel, la piedra y la tijera; ojos, boca y piel. El cornudo, el más deseado y el terco infiel. La puerta, la ventana o caer como hizo Olmedo, del balcón aquel, para no volver. Ser el degenerado, el amor por tu cuerpo o primera vez. Mediodía, medianoche y atardecer. Mejor que dos opciones siempre van a ser tres. Quiero ser asesino, ser la víctima, el testigo. El humo, la bolsa y el vino. El viaje, el primer paso, el destino. Subir, bajar o reaccionar: buscar salidas. Poder encerrar a la libertad y sacarle un poco de verdad y robarle un poco de verdad. Soy un papel en blanco, diez temas en un día o sólo sé no morir de sed. Te amo todo el día, te odio y tengo miedo y quiero ser tren, un camión por la ruta y el tiro a la sien. Me hago Cemento, Museo o algún "cabaré". Soy avenida, la cortada y vuelvo a ser esquina. Empate, local y visita. El dueño, el patrón y la hormiga. Subir, bajar y reaccionar.