Pichicuás y Cupertino Se pusieron con canicas a jugar. Pichicuás que pide mano; Cupertino, "rinincola, cola y tras"
Una raya y un hoyito Que pintaron en el suelo del solar. Se advirtió que "Tres y el fuerte", Que "prohibido comer mano" Y que "Al quede no tirar" Que "las chiras son al tiro" Que "hay calacas y palomas" Y "El ahogado muerto está".
Mi Pichicuás: te sigue Cupertino. Mi Pichicuás: te quiere calaquear. Si ya las traes, apúntale con tino. Mi Pichicuás: lo tienes que ponchar.
Pichicuás y Cupertino Las canicas se empezaron a ganar. Como se jugó de a devis Buenos tiros se cambiaron de lugar.
Cupertino que hace trampas Y hartos dengues pa´ciscar al Pichicuás. Pichicuás que se lo poncha, Cupertino que hace concha Y no le quiere pagar. -Mis canicas me las pagas-; y que empiezan las trompadas, ¡Ay, mamá, qué feo es jugar!
Mi Pichicuás: de a devis nunca juegues. Mi Pichicuás: de a mentis es mejor. Pos no está bien que ganes y les pegues, ¿qué va a decir de ti tu profesor?
Yo, como tú, también fui peleonero. Yo, como tú, también fui re hablador. Pero una vez me puse con el "güero" Y ya lo ves: ¡se me acabó el rencor!