El viento, el viento que mueve las hojas de un gris otoñal donde en un parque solitario en la madera de un banco pintaron un corazón y por culpa del otoño las hojas lo cubrió, y por culpa del otoño las hojas lo cubrió.
Se cuela indiferente entre la gente sin avisar y conoces en la calle la palabra solea, y conoces en la calle la palabra solea
Otoño, la estación de la melancolía, la que te inspira pa escribir, la que te enseña a meditar, la que te llama a resurgir a la rutina de la vía.
El viento y el otoño son tan amigos que en los patios solitarios juegan a los remolinos.
El viento y el otoño son tan amigos que en los patios solitarios juegan a los remolinos.
Llevan por bandera la palabra libertad, no existen caenas ni siquiera cuerda alguna para poderlos atar. Ellos entran donde quieran, ellos pasan sin llamar, ellos entran donde quieran, ellos pasan sin llamar.
Otoño, el que te invita al hogar, el viento ha preguntao por ti esta jugando con el mar dijo que fueras por allí que buscareis al temporal, dijo que fueras por allí que buscareis al temporal.
El viento y el otoño son tan amigos que en los patios solitarios juegan a los remolinos. (x2)