Un día contaba ante mis dedos aparte de una llamada a algún recuerdo y tantas ganas de asomarme a mi interior pero al toparme cara cara con la voz que sé llevara atado a poco más que muchos otros tipos como yo.
Me hizo pensar que había una sola que esperaba por mis pasos sentada ante un ventanal casi llegué al remordimiento por hallarme tan ligero y no contar entre mis dedos lo que das lo malo en todo es que ya sé como lo das.
Como té extraño amor que voy a hacer sin ti que voy a hacer cundo la lluvia me haga voces cuando deje de cansarme la rutina de trazarte aquí en mi cuerpo tan descubierto como lo siento.
De mañana y madrugada sin tu pelo hasta mí almohada pasa frío y no sé diga mi piel no se lamenta más en mí porque no puede hacer sertirme más dolor y yo lo siento sí señor.
Tenía un ánimo gris silbando al viento en la ventana un tipi-tipi que quería charlar lloviendo dos semanas de cansarme de una vida por delante y tu recuerdo, como me acuerdo.
Como la quiero repetía ya más fuerte la razón que el sentimiento y en fin son solo cosas y palabras para hallarme con que hoy soy solo un sujeto que ya no sueña con ser tu sueño.