Hace días que el camino va tirando más lejanos lejos de las colinas y esos solares viejos que me son familiares y que aprendí a querer como quiero y conozco todo lo que se fue.
Hace días te contaba que me alejo y espiro flores de otros jardines polvos de otros caminos que e observan lugares y gente que jamás se acordó de los tantos que nos siguen detrás.
Hace tardes enteras que se asoma la noche entre malos presagios y negros nubarrones que cuelgan del cielo y me esconden del sol y me dejan pensar que soy yo el que no estoy.
Hace días que tropiezo y me aferro a la marcha bajo el rayo del sol y el fresco de la escarcha sé que hay cosas que quedan y cosas que pasan y entre cosas que pienso pienso en volver a casa.
Hace ya tantos días que la luna lejana se ha colocado en el cielo desde horas más tempranas y su luz de satélite antiguo y distante me ilumina en las noches de camino menguante.
De hace tiempo no puedo calmarme estas ansias que me dejó un amor que ocultan las distancias pero nada me dice que sigue delante si el lugar que busqué o el fin del caminó que de tanto andar se perdió en el paisaje y de lejos se ve continuado su viaje.
La canción compara mi guitarra y mi bastón sueños que se perdieron clamando perdón que antes de irse olvidando se atan a mí sino y me muero a lo lejos estas días de camino.
Hace más de cien veces cien que no te miro que lo único que alivia el dolor son suspiros Que he olvidado los rostros de aquellos que quiero y no alcanza el dolor ni todo el desespero y me inundan los ojos gruesos gotones y se van a volar las imaginaciones de vuelta al pasado más siempre me alcanzan soñando el camino para volver a casa.