Con la chata al tranco lerdo lo vi rumbo al puerto, esta mañana, a Julián, y le oí entre dos chiflidos decir: -¡Chá digo... con los amigos!... -¡Vos llevás un entripao!, le grité, ¡Desahogate en este amigo, Julián! Y al oír la palabrita, con su risita me dijo al pasar:
-¡Che... de "amigo", vas finao! ¡Hoy, ni a Dios le doy el lao!... ¿Vos no te acordás del gayego Juan Cruz, que por la luz me juró l'amistá? ¡Ese, anoch'e mi bulín me piantó la quincena que a la tarde cobré, el traje nuevo, el bandoneón, la botella de caña... y mi mujer!...
Con la chata al mismo tranco tardón, por el Bajo va doblando Julián, y el sudeste trae su amarga canción: -¡Chá digo... con los amigos!... Y al pensar yo en cada amigo, mi Dios, que m'exprime y me resulta al final más inútil qu'el ombligo, compadre... digo lo mismo 'e Julián: