Fuimos mucho mas que nada, fuimos la mentira, fuimos lo peor. Fuimos los soldados a la madrugada por esa ambición.
Y ahora estoy en libertad, y ahora que puedo pensar, en no volver a ser ese mismo de antes.
Que tristeza hay en la ciudad, amor, sábado soleado... Y en el centro de la estatua del dolor me sentí Paradó, me sentí Paradó...
Fuimos mucho más que todos, reyes de la noche, de esta tempestad.
Si te vendí, si te robé, te traicioné, fue por uno mas.
Y ahora estoy en libertad, y ahora que puedo pensar, en no volver a ser ese mismo de antes.
Que tristeza hay en la ciudad, amor, sábado soñador... sábado soñador... Y en el centro de la estatua del dolor me sentí Maradó, me sentí Maradó...
Fuimos perros de la noche, oxidados en tristeza... y... Que tristeza hay en la ciudad, amor, sábado soñador... sábado soñador... Y en el centro de la estatua del dolor me sentí Maradó, me sentí Maradó...
Y querer lo que querés, sin tener que lastimar, recordando que tu amor, se robó mi dignidad, olvidémonos los dos, no volvamos a empezar, para que . . . para que . . .