En un depósito sucio, bastión de la Ciudad Vieja La hermana de la coneja, perdió la virginidad. Testigo en la oscuridad, un colchón apolillado Que quedó como estampado, con indeleble memoria Y es origen de esta historia, que no se bien si es verdad
Fue como siempre sucede, se colaron con el Tito Aquel morocho flaquito, que la conquisto con mimos. Y desafiando al destino, se dejo de franeleos Se alborotó el avispero, dieciseis años es mucho Cuando te da como un chucho, y la vida pide cuero.
Después cuentos conocidos, que le vamos a hacer Que no lo podes tener, que ya conseguí la guita. Un llanto cuatro caricias, que todo va a salir bien El fondo de un almacén, el adiós al flaco Tito Y el comienzo de un periplo, más hamacado que un ren.
Hoy es señora de tal, y en el este veranea No imagina el que la vea, que era de playa Pascual. Su camelo viene mal, vate, chicos y colegio Te la trabaja de regio, y anda en checo bien debute Con goma en lugar de yute, y sin preguntar los precios.
Ahora si que se divierte, en pavada de colchón Pelo corto a la Garzón, y lentes con cadenita. Recurre al sicoanalista, a la hermana ni la nombra Pero la marca una sombra, que nunca pudo esquivar Como la vino a quedar, allá por la Ciudad Vieja