Se dijeron: «Hay que ganar tiempo a los sueños, hay que ir mucho más allá de las palabras. Ser como somos de cepa y raíz. Quemar las naves, navegar a pelo sobre la cresta de la ola. Amor valiente para ti, para ganarle terreno a la vida y contemplarla compartiéndola. Hasta que haya que decirse adiós. Uno dentro del otro y cada cual en su sitio. Pensar en voz alta y probarlo todo.» Y lo hicieron... ganándole tiempo a los sueños y comprometidos sólo en las coincidencias y la mutua complicidad. Eran semilla de eternidad compartiendo los juguetes y las vivencias. Amor valiente para ti... Va donde va y dura lo que dura. No hay límites ni medidas. Hasta que haya que decirse adiós. Uno dentro del otro y cada cual en su sitio. Pensar en voz alta y probarlo todo. Hasta el final hay que ganar tiempo a los sueños. Hay que ir mucho más allá de las palabras. Ser tal como somos y decirse adiós si la vida diaria ha hecho de las suyas y ha cambiado las cosas y también a nosotros. Amor valiente para ti, para ganar terreno a la vida y agotarla y exprimirla. Hasta que haya que decirse adiós.