Desde el fondo oculto de tu cielo Vuelven las flores tristes de candor Pintadas con ladrillo en el suelo Humeante de jarilla y de temor
Las palmas de las manos se besaron Cubriéndote la boca de omisión La siesta y las muñecas antiguaron Partiendo rumbo al sueño sin canción
Hoy la luz penetra por las llagas Del alma soleando tu interior Angustia de pupilas apretadas Asumen nuevas formas del amor
El miedo acribillado en las tristezas Los huesos aliviados al volar Los ojos de tu hija en las certezas Y la tierra mojada Que a la semilla viene a despertar
Antes de los días sin pudores Lo único seguro era dudar El pacto azul entre los perdedores Que migran sin moverse del lugar Sus dedos en el hombro equivocado Y tu pesado don de remendar Las penas de cristales condenados A no tener colores que filtrar
La niña desato en tus entrañas Los nudos de la despedida Bailando sobre el polvo de las alas De antiguas mariposas prometidas
El miedo acribillado en las tristezas Los huesos aliviados al volar Los ojos de tu hija en la certeza Y la tierra mojada Que a la semilla viene a despertar