Tiempos duros corren sobre las ciudades; Paraíso que convierte a multitudes, encajados como piezas que se nutren,del hastío, la rutina y ambiciones.
Nuevo orden, nuevos medios, es la nueva fe. Nuevos odios, nueva libertad y el rencor.
Nadie supo cómo vino ni cómo empezó las preguntas empezaron cuando amaneció. En las paredes solo lo que puedes ver. sobre papeles todo lo puedes perder.
Un abrazo, la palmada, un halago falso que, al menor descuido, te come por dentro.
Los adeptos, el rechazoy hasta el miedo el fin siempre justificará los medios. Esperando,a que nos vuelvan a dar lo más fácil siempre es dejarse llevar.
Despertar, aunque sea por delirio. Y encontrar una bolsa de aire. Sin perder, dime cómo vuelves,dime cómo sales, si al volver si ni tú te puedes ver.
Al límite, a cada paso que doy. Al límite, arriesgando. Al límite, ciegos de locura. Al límite, vamos tirando.
Atrapados en silencio a plena claridad, aunque no se ven las redes ¡están detrás! Laberintos sin salida miran sin piedad, para ver si desesperas como un animal.
Despertar, aunque sea por delirio. Y encontrar una bolsa de aire. Sin perder, dime cómo vuelves, dime cómo sales, si al volver si ni tú te puedes ver.
Al límite, a cada paso que doy. Al límite, arriesgando. Al límite, ciegos de locura. Al límite, vamos tirando.