Una cita contigo tenía el profeta En el monte Horeb Espero en una cueva impacientemente Que viniera hasta el Un gran celo sentía al ver que su pueblo No te amaba Que voy hacer pensaba el Que voy hacer
Se escucho un viento recio Que rompía las peñas Pero no eras tu Luego un terremoto que estremeció el monte Y tampoco eras tu Después de esto un fuego que quemaba todo Y tú no estabas Donde estarás Señor Jehová Donde estarás
En el silbo apacible llegaste llegaste Cuando en todo aquel monte Reino la quietud No fue en el viento recio Tampoco en el fuego Ni en el terremoto Fue en el silbo apacible Que llegaste tu
En el silbo apacible llegaste llegaste Cuando en todo aquel monte Reino la quietud No fue en el viento recio Tampoco en el fuego Ni en el terremoto Fue en el silbo apacible Que llegaste tu
El profeta te cuenta sus preocupaciones Y lo escuchaste tu Y tanto de su vida del miedo Y la angustia Le diste la quietud Porque en todo aquel monte El silbo apacible reinaba Cuando llegaste tu Señor Cuando llegaste tu Señor
En el silbo apacible llegaste llegaste Cuando en todo aquel monte Reino la quietud No fue en el viento recio Tampoco en el fuego Ni en el terremoto Fue en el silbo apacible Que llegaste tu
En el silbo apacible llegaste llegaste Cuando en todo aquel monte Reino la quietud No fue en el viento recio Tampoco en el fuego Ni en el terremoto Fue en el silbo apacible Que llegaste tu
En el silbo apacible llegaste llegaste Cuando en todo aquel monte Reino la quietud No fue en el viento recio Tampoco en el fuego Ni en el terremoto Fue en el silbo apacible Que llegaste tu