Menos azul y más negrura al agua pura sin color, la polla dura congelada el arcĂłn, no quiero besos cuando empiece el tiroteo, que el rechinar de los muelles de somieres cuando quieren galopar, es soneto y melodĂa y poesĂa de verdad, y no tonterĂas del viento,
si despertar son mil quilates de gloria bendita, mejor soñarme remendando velas marchitas, que ya estoy harto de remar, compañera soledad, de tu puerta hasta la mĂa.