Quién te juna, quién te embroca, Pinta brava presumida, pa' largarte por Florida como un Ford a patinar. No manyás, che pelandruna, que te vende desde lejos esa piel de zorro viejo más pelada que Alvear. Despitá, no seas chitrula, que te está enfocando el cana no vengas buscando lana con la raca que tenés. Se te manya el expediente, hasta el modo en que patinas, vos podrás vender sardinas pero amor, ¡ni lo soñes!
Pinta brava, no te olvides del pasado cuando ibas al mercado a comprar el stokafish. Engrupida, te saliste de sirvienta para ser, al fin de cuenta, Pinta Brava una infeliz.
El dorima que te echaste, con un feite en el escracho, cada vez que está borracho la presume de matón; y es un ñorse tan amargo que una noche, en la cortada, lo achicó con la parada hasta el loco Napoleón. No podés meter la mula, son al cuete tantas mañas, lechuceando a las arañas te empacaste, ¡ya lo ves! Pa' de seda, pa' de alhajas... Mucho viento en la sesera y en tu cuarto la catrera que rezonga tu vejez.