¡Música fuerte y divina, de misteriosa atracción! ¡Música de mi Argetina que llega hasta el corazón! Te llaman tango, lo sé sí, por tu ritmo sincero. Naciste del candombero que deleitó a Juan Manuel.
Tal vez te empujó el destino a que cambiaras de sala, pero vestida de gala te han hecho más argentina. Los payadores cantaron con tu ritmos sus estrofas, y el bandoneón la rezonga después que la ha conquistado.
Las chicas y las comadres humildes de corazón, te calzaron la corona que te hizo rey del salón. Carlitos se fue triunfal con una misión sagrada, y ante Dios fue consagrado la música popular.