Montevideo 15 de noviembre de 1955 Montevideo era verde en mi infancia absolutamente verde y con tranvías muy señor nuestro por la presente yo tuve un libro del que podía leer veinticinco centímetros por noche y después del libro la noche se espesaba y yo quería pensar en como sería eso de no ser de caer como piedra en un pozo comunicamos a usted que en esta fecha hemos efectuado por su cuenta quién era ah sí mi madre se acercaba y prendía la luz y no te asustes y después la apagaba antes que me durmiera el pago de trescientos doce pesos a la firma de Menéndez y Solares y sólo veía sombras como caballos y elefantes y monstruos casi hombres y sin embargo aquello era mejor que pensarme sin la sabia del miedo desaparecido como se acostumbra en un todo de acuerdo con sus ordenes de fecha siete del corriente era tan diferente era verde absolutamente verde y con tranvías y qué optimismo tener la ventanilla sentirse dueño de la calle que baja jugar con los números de las puertas cerradas y apostar consigo mismo en términos severos rogámosle acusar recibo lo antes posible si terminaba en cuatro o trece o diecisiete era que iba a reír o a perder o a morime de esta comunicación a fin de que podamos y hacerme tan sólo una trampa por cuadra registrarlo en su cuenta corriente absolutamente verde y con tranvías y el prado con caminos de hojas secas y el olor a eucalitpus y a temprano saludamos a usted atentamente y desde allí los años y quién sabe