En el puerto un aroma de sal y el arrullo que canta en el mar, me han traído el deseo de unos labios que quiero, que me saben tocar, entre el mar y la luna, no hay distancia ninguna, como puede tu boca sin estar, me provoca. En la playa una huella se va de mis pies a tus manos me dan, un lucero que brota, una piel que desboca tantas ganas de amar, entre el mar y la luna, no hay distancia ninguna, de tu boca a mi boca la distancia es tan poca. Deshójame una vez, no mas, un cariño nuevo, un destino bueno, una vez, no más, el sabor primero ese que no volverá. Deshójame una vez, no mas, como nadie puede, como nadie supo, una vez, no más, el sabor primero ese que no volverá jamás. El verano es el canto del mar, unas ganas profundas de dar, un lucero que brota, una piel que desboca tantas ganas de amar, entre el mar y la luna, no hay distancia ninguna, de tu boca a mi boca la distancia es tan poca. Deshójame una vez, no mas, un cariño nuevo, un destino bueno, una vez, no más, el sabor primero ese que no volverá. Deshójame una vez, no mas, como nadie puede, como nadie supo, una vez, no más, el sabor primero ese que no volverá jamás.