Pago mi renta con un poco de blues navío de noche trae el amor a mis brazos suena el piano sobre tablas de nogal el bar se esfuma en dos compases... música de antiguos amigos anclados al mundo por un trago de ron.
Pago mi renta con un poco de blues derrumbada en mi cama tu marea de carne es eterna hada alcohólica bañada por la luna de tus treinta y tres tus rasguños en mi rostro son palabras de un poema limpio limpio como el cielo de tus ojos
Pago mi renta con monedas de mi alma abaratada de mi alma recargada en los muros de un sueño de mi alma de música hambrienta perdida en el corazón de taciturnos bebedores de mi alma encarnada en un polvoso escenario.
Amor: ¿debemos cruzar los puentes ardiendo... las negras ciudades selladas con nuestros dulces espíritus... ansiando la paz de otro mundo... reunidos en la antesala del infierno...? ¿¡Fumando y riéndonos!? Fumando y riéndonos, pisando colillas de entusiasmo... Amor: tú y yo intensos nos hemos desgarrado por un poco de blues.
No dejamos nada al Señor. No dejamos nada al Señor. No dejamos nada al Señor.