Nunca estamos conformes del que hacer de los demás Y vivimos a solas sin pensar en los demás Como lobos hambrientos acechando a los demás Convencidos de que son nuestro alimento los demás Los errores son tiestos que tirar a los demás Los aciertos son nuestros y jamás de los demás Cada paso un intento de pisar a los demás Cada vez más violento el portazo a los demás Las verdades ofenden si la dicen los demás Las mentiras se venden cuando compran los demás Somos juezes mezquinos del valor de los demás Pero no permitimos que nos juzgen los demás Apagamos la luz que por amor a los demás Encendió en una cruz El que murió por los demás Porque son ataduras comprender a los demás Lo tildamos de manía al amor por los demás
Nuestro tiempo es valioso pero no el de los demás Nuestro espacio precioso pero no el de los demás Nos pensamos ilotos del andar de los demás Dónde estemos nosotros qué se aguanten los demás Condenamos la envidia cuando envidian los demás Mas lo nuestro es decidia que no entienden los demás Nos creemos selectos entre todos los demás Seres pluscuámperferctos con respeto a los demás Olvidamos que somos los demás de los demás Que tenemos el humo como todos los demás Que llevamos a cuesta unos menos y otros más Vanidad y modestia como todos los demás Y olvidando que somos los demás de los demás Nos hacemos los sordos cuando llaman los demás Porque son tonterías escuchar a los demás Lo tildamos de manía al amor por los demás