Yo te lo advierto, no me provoques con la mirada, con tu sonrisa ni con tu forma de caminar. Estoy cruzando la línea roja que nos separa. Si estás jugando con fuego; cuidado, te puedes quemar. Si estás jugando con fuego; cuidado, te puedes quemar.
Te lo decía, te lo advertía, no me escuchabas. Pusiste en juego todo tu orgullo y tu vanidad. Y ahora me dices que no te deje, que no me vaya. Quisiste jugar con fuego y el fuego te alcanzó a quemar. Quisiste jugar con fuego y el fuego te alcanzó a quemar.
Y ahora más mucho más, me pides mucho más. Siempre un poquito más aunque no puedas más. Más mucho más, me pides mucho más. Siempre un poquito más aunque no puedas más.
Te lo decía, te lo advertía, no me escuchabas. Pusiste en juego todo tu orgullo y tu vanidad. Y ahora me dices que no te deje, que no me vaya. Quisiste jugar con fuego y el fuego te alcanzó a quemar. Quisiste jugar con fuego y el fuego te alcanzó a quemar.
Y ahora más mucho más, me pides mucho más. Siempre un poquito más aunque no puedas más. Más mucho más, me pides mucho más. Siempre un poquito más aunque no puedas más.