En los mapas del cielo, el sol siempre es amarillo y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo ni los árboles nunca podrán ocultar el camino, de su luz hacia el bosque profundo de nuestro destino.
Esa hierba tan verde, se ve como un manto lejano, que no puede escapar, que se puede alcanzar, solo con volar.
Siete mares he surcado, siete mares color azul, yo soy nave, voy navegando, y mi vela eres tú...
Bajo el agua veo peces de colores, van donde quieren, no los mandas tú...
Por el cielo, va cruzando, por el cielo color azul, un avión que vuela alto, diez mil metros de altitud, desde tierra lo saludan con las manos, se va alejando, no se dónde va, no se dónde va...
Sobre un tramo de vía, cruzando un paisaje de ensueño, en un tren que me lleva de nuevo a ser muy pequeño, de una América a otra, tan sólo es cuestión de un segundo, basta con desearlo y podrá recorrer todo el mundo...
Un muchacho que trepa, que trepa a lo alto de un muro, si se siente seguro, verá su futuro con claridad...
Y el futuro, es una nave, que por el tiempo volará, a Saturno, después de Marte, nadie sabe dónde llegará, si los ves venir, si te trae amores, no te los roben sin apurar.
Aprovecha, los mejores, que después no volverán.
La esperanza, jamás se pierde, los malos tiempos pasarán, piensa que el futuro es una acuarela y tu vida un lienzo, que colorear, que colorear...
En los mapas del cielo el sol siempre es amarillo (tú lo pintarás) y la lluvia o las nubes no pueden velar tanto brillo (tú lo pintarás) basta con desearlo y podrás recorrer todo el mundo (tú lo pintarás)
Compositores: Antonio Pecci Filho (Toquinho), Marcus Vinicius da Cruz de Mello Moraes (Vinicius de Moraes), Maurizio Fabrizio (Mushi), Guido Morra ECAD: Obra #4663392 Fonograma #12758909