Tiñes de negro el azul del cielo,
tu risa nos hizo temer. Alimentas la ira controlas
la vida un negocio bajo tus pies.

Y volver a sentir la agonía de un pueblo
al morir. La vida hoy grita en silencio...
óyela. Y saber que ahora quien dio su voz
por la paz le venden barata promesas que matan la
verdad.

Los recuerdos que invaden tus sueños hoy
hielan la sangre en tu piel. La libertad bajo un
yugo de estrellas crean llagas de hambre y de sed.

Y volver a sentir la agonía de un pueblo
al morir que hastía en silencio componen
lamento, hoy por ti. Y volver a soñar que
la paz no encuentra rival, un mundo ganado por
guerra ha perdido su libertad.

Cuando la violencia te haga frente, usa mis
palabras. Contra el odio de la sin razón,
aun nos queda el corazón, que nos viene a
demostrar que somos mas de dos.

El camino que ocultaste fué el lamento de
los sueños que nunca quisiste ver. Hoy no
callan las palabras de las gentes que lucharon por
encontrar un camino hacia la paz.