De madrugada los seis han llegado con su patera a los corrales derrochando ilusión y nobleza pero ignorando lo que les espera Tras dar sus primeros pasos en la desconocida hacienda se sienten carnaza de toda la gente que con tanta avidez les observa
Sin más los seis se separan por seis oscuras callejas en busca de la ansiada luz negada en su natal tierra. Pronto la suerte para uno comienza ¡se abre la puerta! ¡entra en nuestro mundo! ¡y empieza la fiesta!
Sale con ganas, embiste con fuerza, buscando ese curro que le desespera pero todos los que están frente a el con mucha burla le torean. Sigue embistiendo, empuja y persevera pero todos los que están frente a el le torean y torean, y en los tendidos la gente le mira con absoluta indiferencia
En su constante lucha con gente terrible tropieza que le propina con mucha saña varios puyazos y le pinchan y golpean por su condición materna.
Y en el suelo malherido, saca fuerzas de flaqueza y con más rabia que nunca se levanta y persevera pero los que están frente a el le torean y torean.
Al fin su busca termina en tragedia cuando un mal nacido su cuerpo atraviesa sintiendo un trofeo su muerta piel negra; el mundo racista acabó su faena