Todos pasan por mi rancho Pero nadie se detiene Siempre algún temor les viene Que con nada los engancho.
Y a lo largo y lo ancho De esta historia singular Nunca me pude explicar Qué misterio se despierta Todos llegan a mi puerta Pero nadie quiere entrar.
Y eso que lo tengo limpio Bien cuidado y ordenado Le he cambiado el decorado Y el aroma del incienso.
Pero estoy como al comienzo Que a nadie puedo atraer Ya no se qué puedo hacer, Un buen sitio es el que brindo Todos dicen que esta lindo Y no se atreven a meter.
Ay que pena! Ver la indiferencia ajena Ignorando mi tesoro Ay que pena! Nadie entiende esta condena De estar solo...
Cuando estoy desesperado Cierro sin llave la puerta Dejo la ventana abierta A ver si entra un trasnochado.
Pero nadie se ha asomado Ni por equivocación Ni siquiera un vil ladrón O una inocente incauta Y esta intriga ya me pauta Quien me echó esta maldición...
Ay que pena! Ver la indiferencia ajena Ignorando mi tesoro Ay que pena! Nadie entiende esta condena De estar solo...
Unos dicen que me vaya Que me mude a otro lado Y yo sigo acá sentado Porque pienso dar batalla A esta sarta de canallas.
Y es que no puedo aceptar Morirme sin descifrar Por qué causa o qué carancho Todos pasan por mi rancho Pero nadie quiere entrar.
Ay que pena! Ver la indiferencia ajena Ignorando mi tesoro Ay que pena! Nadie entiende esta condena De estar solo...