I Romántico bulincito, cotorro de mis amores, ya se esfumaron tus flores desde que me abandonó la mujer que fue más adorada, la catriela más mimada que conmigo compartió mis dichas y los desencantos, la que aguantó los quebrantos de la suerte como yo.
II Cuando me pongo a pensar que amurado me dejaste después que tanto jugaste con mi profundo querer, me lo paso inútilmente cavilando eternamente quién te pudo convencer.
II Bis Por tu ausencia sollozando en el bulín solitario ha quedado el mobiliario esperando con dolor ver de nuevo la alegría que falta desde aquel día que marchitaste mi amor...
I Bis Si supieras lo que sufro estar lejos de tu lado tal vez no hubieras plantado al que ayer fue tu bacán. ¿No embrocás que bastante fulero has dejado al cadenero que te quiso con afán? Por eso quisiera olvidarte pa' no tener que extrañarte como un pobre carcamán.
(Trío) Cuántas veces en la pieza al no manyar tu semblante en la catrera un instante yo me suelo recostar y al ratito, embelesado, sueño que me estás besando y despierto suspirando para ponerme a llorar.